12 dic 2011

stories of the christmas. san nicolás. (2)

cuatrocientos años después de la muerte de jesús el nazareno, un hombre retomaría como misión de vida el acto de dar para avivar la inextinguible antorcha de la paz, para multiplicar la fausta lumbre del amor, su nombre, nicolás de bari.

san nicolás: un turco delgado y moreno.

el verdadero san nicolás nació en el siglo iv de la era cristiana en los valles de lycia, en el asia menor y vivió la mayor parte de su juventud en ptara, en el suroeste de la actual turquía. fue uno de los santos más venerados por los cristianos de oriente y occidente durante la edad media. era delgado, enjuto y de tez olivácea.
san nicolás de bari, como hoy en día se le conoce, nació en una familia acomodada de comerciantes. luego de que sus padres fallecieran por culpa de la peste, repartió su cuantiosa herencia entre la muchedumbre que había sobrevivido a la catástrofe. así las cosas, se puso en camino hacia myra (turquía), para buscar a su tío que era el obispo del lugar.
tras el deceso de su tío, nicolás, ya ordenado sacerdote, fue nombrado obispo de myra. se convirtió en el prelado de los niños -tal fue su amor por los pequeños- y se hizo muy popular por su gran generosidad y amabilidad para con los más necesitados.
no reparaba en esfuerzos para ayudar al indigente, al leproso; su verbo consolador y su asistencia espiritual atenuaban el dolor de las viudas, el desconsuelo de los huérfanos, el desasosiego de los moribundos; como un renovado multiplicador de peces y panes, promovía una constante acción social para atender las penurias más urgentes de su prójimo; se le podría considerar una suerte de precursor medieval de la madre teresa de calcuta.
cuando murió, su fama se extendió por toda europa. rápidamente, se le atribuyeron toda suerte de portentos: desde furtivas salidas nocturnas para repartir regalos entre las gentes más humildes, hasta milagros como apaciguar tempestades, mitigar males físicos o resucitar muertos. en el año 1047, cuando los musulmanes invadían turquía, unos marineros rescataron sus restos y los llevaron a la ciudad de bari, ubicada en el tacón de la bota itálica.
en la actualidad, la iglesia católica le reconoce a san nicolás un sinfín de patrocinios y devociones: es protector, por supuesto, de los niños y de los marineros; de los limpiabotas; de los delincuentes que se arrepienten de sus malas obras; de los panaderos, cerveceros y farmacéuticos; y, cuando no, de los recién casados. además es santo patrono de rusia, turquía, grecia, sicilia y de la cosmopolita ciudad de amsterdam, en holanda.
a partir del siglo xiii, la fama navideña de san nicolás de bari se consolidó plenamente. pero en aquella época, los regalos no aparecían el 24 sino el 6 de diciembre, día oficial de su onomástico. desde esa época, la navidad ha sido celebrada ininterrumpidamente en todos los países de la cristiandad, a excepción de inglaterra, donde los puritanos la prohibieron (por su añejo origen pagano) durante más de un siglo, entre 1552 y 1660.
con el ejemplo de nicolás de bari aprendemos que el dar y el recibir constituyen profundos hábitos espirituales que se perpetúan más allá de las eras, los siglos; esclarecen la mente de quien los practica y disipan de él la demencial percepción de escasez que rige los sendero del ego.

fuente: momentos.

2 comentarios:

  1. Curioso que la festividad de Reyes coincida con esa fecha. La verdad es que tampoco nunca había investigado sobre el asunto.

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  2. tal parece que una vida de amor y desprendimiento cala mucho en el alma de las gentes que su recuerdo perdura por siempre. un beso.

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