en su libro del espíritu de las leyes (1748), montesquieu, dice: "las leyes que da el legislador para toda la sociedad deben guardar relación con el principio de cada gobierno."
y también dice lo siguiente: "la virtud política en una república es sencillamente el amor a la república; y el amor a la república en la democracia es amor a la democracia, y éste es amor a la igualdad. es además, amor a la frugalidad. cada cual debe gozar de la misma felicidad y de las mismas ventajas, disfrutar de los mismos placeres y tener las mismas esperanzas, lo cual sólo puede conseguirse mediante la frugalidad general.
"el amor a la igualdad, en la democracia, limita la ambición al único deseo, a la única felicidad de prestar a la patria servicios mayores que los demás ciudadanos. no todos pueden prestarle servicios iguales, pero todos deben prestárselo. al nacer se contrae con ella una deuda inmensa que jamás puede ser saldada.
"por eso en la democracia las distinciones nacen del principio de la igualdad, aun cuando parezca suprimida por servicios excepcionales o por talentos superiores.
"el amor a la frugalidad reduce el deseo de poseer al cuidado que requiere lo necesario para la familia e incluso lo superfluo para la patria. las riquezas dan un poder del que un ciudadano no puede usar en su propio provecho, pues entonces no habría igualdad. igualmente proporciona delicias de las que no debe disfrutar porque irían también contra la igualdad.
"cuando se vive en una sociedad en la que las leyes han establecido la igualdad y la frugalidad, estas mismas virtudes son el excitante del amor que nace por ellas.
"en las monarquías y en los estados despóticos nadie aspira a la igualdad; ni siquiera se le ocurre a nadie semejante idea; cada individuo tiende a la superioridad. las personas de más baja condición sólo desean salir de ella para ser dueños de los demás.
"lo mismo ocurre con la frugalidad; para amarla hay que disfrutar de ella. los que están corrompidos por los placeres no serán ciertamente los que apetezcan la vida frugal, y si esto fuese natural y corriente, alcibiades no hubiera sido objeto de la admiración de todo el mundo. tampoco amarán la frugalidad aquellos que envidian o admiran el lujo de los demás; las personas que no tienen ante los ojos más que hombres ricos, o miserables como ellos, detestan su miseria sin amar ni conocer lo que constituye el fin de dicha miseria.
"es pues una máxima verdadera que para que se ame la igualdad y la frugalidad en una república es preciso que las leyes las hayan establecido."
41 años después de la publicación del espíritu de las leyes, ocurrió la revolución francesa; una revolución burguesa que se trajo abajo la monarquía e hizo suyas las ideas progresistas de los grandes filósofos y enciclopedistas, (entre ellos, montesquieu).
el lema original de la revolución francesa, era: "libertad, igualdad, fraternidad, o muerte". es decir, quien iba en contra de la libertad, de la igualdad o de la fraternidad, recibía la muerte pasando por la guillotina. es por eso que cuando alguien se dirigía hacia una persona, se le anteponía la palabra "ciudadano" a su nombre o apellido, si es que era conocido; o llamarlo "ciudadano" simplemente, si no se le conocía. todos eran iguales y los títulos nobiliarios estaban proscritos.
todos los que pertenecemos a una república somos en cierta manera hijos de la revolución francesa.
y para terminar, hay personas que no se sienten iguales a otras, tienen una ínfulas de superioridad que hacen que no quepan en su propio pellejo; son las que generalmente miran con desprecio a los demás y les dicen con soberbia a la autoridad después de haber cometido un delito para amedrentarla y pasar por encima de ella, lo siguiente: "tú no sabes quién soy yo". y la autoridad finalmente lo que hace es proceder con el reglamento y tratarlo como a cualquier ciudadano, porque en una república, todos somos iguales ante la ley.
Así es ante la ley todos somos iguales pero ante la justicia a veces hay que tener ojo con algunos jueces y políticos. Muy buena entrada amigo da para reflexionar bastante.
ResponderEliminarUn beso desde Plegarias en la Noche
este texto es como un recordatorio porque muchos lo ignoran o lo olvidan, y después están en problemas preguntándose ¿qué pasó?
Eliminaramiga tiffany, un beso. que tengas un buen comienzo de semana.
Siempre me gusto el pensamiento de Montesquieu tienen mucha razón. El problema con las revoluciones es que al final se gana un poco pero siempre queda el poder en manos de unos vivos. Te mando un beso.
ResponderEliminarsiempre hay algunos que quieren obtener ventaja pasando sobre los demás; tal es por cierto parte de la naturaleza humana.
Eliminarun beso. que tengas un buen inicio de semana.
Bueno amigo has puesto muy buenos ejemplos , pero en la práctica no todos somos iguales , todo depende del vil dinero y de donde hallamos nacido , si en cuna o pesebre.
ResponderEliminarLas democracias asi lo dicen todos ante la ley somos iguales, pero en la práctica, sabemos que no es verdad.
Pero has hecho bien en recordarnos que hay leyes, al menos eso si s ehan molestado en hacerlas.
Un abrazo, y te deseo una feliz semana y principio de mes de mayo .
cuando en una sociedad republicana prevalece el poder del dinero o el estatus social de unas personas sobre otras, la república comienza a ser inviable porque aparece la mediocridad y la corrupción. lo bueno de estos tiempos donde con tanto adelanto tecnológico la gente que tiende a estas malas prácticas terminan siendo grabadas en audio y video; terminan siendo puestas en evidencia tarde o temprano.
Eliminarun abrazo y también te deseo lo mejor en lo que resta de esta semana ya iniciada.
Ay mi querido DRACO!!! Qué lejos quedan todas estas consignas y qué ingenuos quienes suponían que por proclamar la ¡igualdad! a grito pelado o subiendo y bajando la guillotina sobre las cabezas de los nobles se iba a conseguir…para empezar, tanto en las repúblicas, como en las monarquías absolutas e incluso las parlamentarias, como en las democracias y no digamos en cualquiera de los sistemas totalitarias, siempre ha subsistido una élite amarrada al poder que con el nombre que quieras darle permanece y al final se impone. Siempre ha sido así. La teoría perfecto, la práctica nefasta porque la realidad es que los propios líderes que proclaman y se han venido llenando la boca con la palabra “igualdad” se han aupado por encima del resto, cuando dices una cosa y haces la contraria te sumes en la incoherencia y el mejor postulado fracasa. La igualdad es una utopía tan deseable e inalcanzable, como la felicidad, de hecho este mundo 300 años después de todas estas grandilocuentes palabras es muchísimo más desigual que nunca. Ojalá se nos metiera en la cabeza que es cierto, que todos somos tan iguales en derechos como diferentes en nuestra individualidad pero la vanidad, la soberbia y la ambición desmedida del ser humano termina con todas las buenísimas intenciones.
ResponderEliminarMuchas gracias por recordarnos lo que creo nadie, ha aprendido jamás ¡ ; )
Muchos besos y feliz semana ( a ver si mañana o pasado te llego allí, y aun nos queda algo de agua… para charlar ; )
pero siempre es muy bueno saber y tener conciencia de ciertos conceptos para poner en su sitio a tanto desubicado.
Eliminaren estados unidos por ejemplo, cuando algunos famosos de hollywood de vida vacía cometen delitos (sobre todo de tránsito) van y le dicen a la policía la clásica, "tú no sabes, quién soy yo", o su alterna "tú no sabes con quién te has metido"; y los policías ya aleccionados y preparados para tratar con esta gente, igual les ponen la multa y si el tipo se pone muy faltoso, lo enmarrocan y se lo llevan detenido a la dependencia policial y que luego ya el juez disponga. cuando uno tiene conciencia de que se vive en una república y de que todos son iguales ante la ley teniendo los mismos derechos las cosas funcionan mucho mejor.
lo otro, como bien dice montesquieu, en las monarquías (supongo que se habrá referido a las absolutistas de su tiempo) y en los estados despóticos (aquí bien pueden entrar los estados totalitarios tipo urss, corea del norte, china, cuba, venezuela o la actual nicaragua) la igualdad no existe.
las ideas de montesquieu que hicieron suyas los revolucionarios de la revolución francesa, aún siguen vigentes.
besos.
Ay Draco, aquí en España NO somos iguales, la democracia la jalean algunos para mantenerse en puestos de poder y continuar con sus privilegiios y sus prevendas, pero ni se la creen ni la quieren. Afortunadamente hay otros tantos grupos que sí la intentan defender y en esas estamos. Me da mucha pena y mucha rabia. Todavía nos queda mucho camino para estar a la altura de otros paises europeos en los que sí hay más conciencia democrática. El franquismo nos hizo retroceder muchísimo mientras otros avanzaban, todavía hay quienes lo jalean, pobres ignorantes (o algo mucho peor)
ResponderEliminarSi todavía tenemos realeza jadfjadsjfoagjigjiajfjad, me da repelús que alguien defienda que un tipo por haber nacido en determinada familia tenga los privilegios tan bestiales que tiene. Y encima nos avergüenza.
Me he soltado la melena, Draco jajajajaja
Besitos pirata
es la (o las leyes) las que otorgan la igualdad en una república. el mismo montesquieu da a entender que por el bien del sostenimiento de la república las personas no deben (por más que puedan) imponerse por la fuerza de su dinero, de su mayor educación o su estrato social porque va en contra de la igualdad. los ciudadanos no deben generar abusos o ir en contra de la ley, porque todos somos ciudadanos con los mismos derechos.
Eliminarpara montesquieu el gobierno de franco lo consideraría un "estado despótico".
la verdad es que no sé cuáles son los justificativos y motivaciones para mantener la realeza en españa; pero hace un buen tiempo leí que con respecto a la monarquía inglesa, que era por el bien del turismo.
besos.
Por el turismo, anda que....con la pasta que les sale mantener tremenda antigüalla. Aquí la única explicación es que hay tontos muy tontos a los que les gusta ser vasallos.
EliminarUn placer siempre intercambiar opinión contigo.
Muaaack
cuando yo leí aquello de que por el bien del turismo había que mantener la monarquía inglesa, pensé inmediatamente en francia; ellos abolieron la monarquía dos veces con sendas revoluciones y el turismo allí no se ha resentido; lo que demuestra que es la cultura de un país lo que atrae el turismo al margen de si hay monarquía o no.
Eliminartambién para mí es un placer intercambiar ideas contigo.
besos.
Todos somos iguales ante la ley, pero al menos en México parece que con dinero se olvida y aquellos que no tienen el recurso. Tienen menos acceso a la justicia. Te dejo un abrazo
ResponderEliminarsí, la igualdad ante la ley se puede "olvidar" mediante cualquier recurso; pero que después no se quejen de que por qué está tan mal el país.
Eliminarun abrazo también para ti.